Un trabajo impulsado por Fundación FERO y liderado por el Vall d’Hebron Instituto de Oncología (VHIO), que forma parte del Campus Vall d’Hebron, bajo la dirección del Dr. Joan Seoane, director de Investigación Traslacional del VHIO, jefe del Laboratorio de Expresión Génica y Cáncer y profesor ICREA y de la UAB, ha demostrado como el análisis del ADN tumoral circulante (ctDNA son las siglas en inglés) en el líquido cefalorraquídeo mediante biopsia líquida puede ser una herramienta de gran utilidad en el manejo de los pacientes pediátricos con meduloblastoma. El artículo, que acaba de ser publicado en la revista Nature Communications, es fruto de un trabajo colaborativo y multidisciplinar de diferentes equipos del Campus Vall d’Hebron liderado por el Dr. Seoane con la participación, entre otros, de la Dra. Laura Escudero, primera autora del estudio; el Servicio de Oncología Pediátrica del Hospital Universitari Vall d’Hebron, con el equipo de las doctoras Soledad Gallego y Anna Llort, y el Servicio de Neurocirugía del hospital, con la participación de los doctores Juan Sahuquillo, Maria Antònia Poca y Francisco Martínez-Ricarte.
“La caracterización molecular del meduloblastoma es crucial para el correcto manejo y tratamiento de esta enfermedad. Sin embargo, la obtención de una muestra de tejido para su análisis está limitada por el hecho de que el tumor se encuentra en el cerebelo y eso dificulta mucho el acceso quirúrgico a biopsias”, explica el Dr. Seoane, quien recalca que este nuevo trabajo demuestra que el análisis del ctDNA podría ayudar al diseño de estrategias terapéuticas personalizadas más efectivas y a reducir los tratamientos excesivos para prevenir efectos secundarios a largo plazo. Como ya ha sucedido en otros tipos de tumores cerebrales y ha quedado recogido en trabajos de este mismo grupo, el líquido cefalorraquídeo –líquido que recorre todo el sistema nervioso central– tiene un gran valor como matriz biológica en donde poder detectar ADN tumoral. El ADN de un tumor cerebral no se suele detectar en la sangre sino en el líquido cefalorraquídeo de los pacientes.
Una enfermedad muy heterogénea
El meduloblastoma es el tumor cerebral más prevalente en la infancia y se trata de un tumor complejo y heterogéneo con un amplio rango de pronóstico, y es en algunos casos una neoplasia extremadamente agresiva. La resección quirúrgica del tumor es actualmente la primera opción en el tratamiento.
El líquido cefalorraquídeo como respuesta a las dificultades de acceso a estos tumores
Todos estos desafíos hacen necesario el desarrollo de nuevas herramientas que permitan la caracterización molecular de la enfermedad y hacerlo a través de métodos lo menos invasivos posible. La hidrocefalia –aumento de la cantidad de líquido cefalorraquídeo– es muy común en los pacientes pediátricos con tumores de la fosa posterior como el meduloblastoma. “En estos casos, y antes del tratamiento quirúrgico del tumor, se requiere el drenaje del líquido cefalorraquídeo para aliviar la presión intracraneal. Además, las muestras de líquido cefalorraquídeo se recolectan de forma rutinaria para su análisis citológico. Tenemos, por tanto, la posibilidad de acceder fácilmente a estas muestras”, señala la Dra. Laura Escudero, primera autora del estudio, al tiempo que incide en que el estudio del ctDNA en líquido cefalorraquídeo aún no se había explorado en este ámbito pediátrico.
El trabajo que ahora se ha publicado, ha sido posible gracias al apoyo de la Fundación Fero y de la Sociedad Estatal Loterías y Apuestas del Estado (SELAE) a través de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). En definitiva, el proyecto demuestra como el análisis del líquido cefalorraquídeo permite identificar alteraciones genómicas del tumor durante la progresión tumoral e incluso antes de la cirugía, ayudando a la determinación del pronóstico del tumor, a la identificación de recurrencias y a la monitorización de la evolución tumoral para ajustar el tratamiento a cada tumor de cada paciente en cada momento. Así mismo, el análisis del ctDNA también ofrece información valiosa para determinar diferentes tratamientos y avanzar en la personalización en el tratamiento de estos pacientes.